Sexyland está muerto
Publicado: Vie, 22 Jul 2016, 14:11
Hola a todos,
No es que sea muy asiduo a los sex shops ni mucho menos, pero cuando me entra un calentón y si tengo tiempo y ma apetece, suelo acercarme a Sexyland, que es el que me cae más cerca del trabajo y de ese modo puedo descargar y volver a la oficina en menos que canta un rabo.
Soy consciente que estos sitios, nos guste o no, son antros, pero precisamente ahí radica el encanto y he de decir que en esos antros he tenido sesiones de sexo que no he tenido en una cama en la intimidad. Así como he conocido a gente majísima e interesante con la que no solo se puede follar (un saludo a tio43morbazo).
El problema y causa de que tome la decisión de dejar de ir a Sexyland en concreto no son las instalaciones, ni el precio, ni lo cansino que se pone tiomorbo32 con las promociones, y mucho menos los abuelos, que tampoco molestan tanto como os quejáis algunos.
El problema es cuando, como hoy, se me echa encima entre las cabinas un yonki apestando a alcohol, con unas pintas, no de cambiar de acera sino de ciudad y me pide dinero para un bocadillo mientras me manosea la polla.
Señores, hay límites. Y ya se que no pueden poner a nadie filtrando en la puerta de entrada o a un segurata en el interior, lo cual sería ridículo. De modo que, viendo como se está poniendo el panorama entre la baja afluencia de gente y que cuando vas te encuentras casos o cosas como esta, lo que es yo: me retiro.
No es que sea muy asiduo a los sex shops ni mucho menos, pero cuando me entra un calentón y si tengo tiempo y ma apetece, suelo acercarme a Sexyland, que es el que me cae más cerca del trabajo y de ese modo puedo descargar y volver a la oficina en menos que canta un rabo.
Soy consciente que estos sitios, nos guste o no, son antros, pero precisamente ahí radica el encanto y he de decir que en esos antros he tenido sesiones de sexo que no he tenido en una cama en la intimidad. Así como he conocido a gente majísima e interesante con la que no solo se puede follar (un saludo a tio43morbazo).
El problema y causa de que tome la decisión de dejar de ir a Sexyland en concreto no son las instalaciones, ni el precio, ni lo cansino que se pone tiomorbo32 con las promociones, y mucho menos los abuelos, que tampoco molestan tanto como os quejáis algunos.
El problema es cuando, como hoy, se me echa encima entre las cabinas un yonki apestando a alcohol, con unas pintas, no de cambiar de acera sino de ciudad y me pide dinero para un bocadillo mientras me manosea la polla.
Señores, hay límites. Y ya se que no pueden poner a nadie filtrando en la puerta de entrada o a un segurata en el interior, lo cual sería ridículo. De modo que, viendo como se está poniendo el panorama entre la baja afluencia de gente y que cuando vas te encuentras casos o cosas como esta, lo que es yo: me retiro.