mi vecino militar y la sorpresa
Publicado: Sab, 05 Nov 2016, 13:17
Levaba sin saber nada de mi vecino varias semanas, supuse que estaría de maniobra, no podía pensar en otra cosa que no fuera en él. Hacia calor era uno de esos días que no te apetece hacer nada, el calor te deja como plomo, así que me puse una peli y al sofá con el aire a tope. Tras 20 minutos de peli llamaron a mi puerta, pensé "joder", decidí no abrir pero volvieron a llamar (esta vez mas insistente). No tuve remedio fui para ver quien era, al abrir sorpresa!! era mi militar. Estaba guapísimo, se había cortado el pelo, venia bronceado con una camiseta roja muy ajustada y un macuto enorme, me dijo; hola me has echado de menos mamón? a las 10 en mi casa. Sin dejar que respondiese se dio la vuelta y se fue a su casa, me puse muy nervioso, había regresado y con ganas.
Llegó las 10 de la noche, yo llevaba listo como 1 hora, ansioso por ir, pero me quería hacer el duro para que no notase mis ganas de verle. A las 10 y 10 cerré mi puerta y llamé a su timbre, tardó en abrir.
Llegas tarde, esa fue su bienvenida, tímidamente dije " lo siento". Entramos en su casa iba hacia su salón, al llegar vi la mesa preparada para una cena de dos, me hizo tanta ilusión, otra cenita romántica y polvazo de postre. El militar no hablaba y yo a mil quise romper el hielo y le dije; que tal te ha ido? respondió secamente muy bien mucho curro, muy cansado.
Mi vecino se sentó a la mesa y yo seguí sus pasos y fui a ocupar la otra silla pero antes de que me sentara dijo; que coño haces? eso no es para ti. Mi cara tuvo que ser un poema porque se empezó a reír añadiendo ; hoy te toca servir la cena y las copas, espero que te comportes mamón. Yo no entendía nada, le pregunté que ha qué se refería y antes de que pudiera contestar.... salió del baño un tio. Adiós a la cena romántica, el militar dijo: te presento este es mi compañero de curro, se quedará unos días. El tipo ( alto, musculoso, rubio de piel blanca, todo lo contrario a mi vecino) se acercó y me dio la mano, mi militar le dijo; es mi vecino y hoy nuestro camarero. En ese momento quise morir, no sabía como reaccionar, estaba flipando.
Así fue durante una hora y media fui el camarero de los dos militares, solo me hablaban para pedir mas vino o pan, para servir otro plato o poner un hielo más, entre ellos se contaban sus historias tales como;"puf ayer me folle a una zorrita, la muy puta tragaba de vicio" o " menudo culo tenía para follarlo a saco, pero no se dejó para la siguiente jajajaja" y yo allí plantado sin moverme y sin hablar.
Tras un buen rato de cena y copas me dijo; retira la mesa que ya molesta, obediente lo hice, estaba loco por irme. Cuando terminé de recoger fui al salón y les dije a los militares; bueno me voy espero que disfrutasen de la cena ( con un tono irónico) el compañero me miró con cara rara y mi vecino dijo; aún no has terminado por hoy.
Mi militar y su compañero estaban sentados en el sofá y yo frente a ellos, cuando me dijo; ahora de postre ( con cara de picaron) vas a chuparle la polla a mi compi. El compañero se bajo la cremallera y sin pensarlo saco su polla, era rosada no muy larga pero gruesa y dijo; venga marica cumple ordenes de tu dueño. Yo no podía creerlo me estaba haciendo su zorra particular, antes de que pudiera reaccionar mi vecino me soltó ; venga joder comele la puta polla hasta que te diga que pares. Así fue me arrodille y comencé a chuparle el capullo, mi vecino miraba atento, era un capullo enorme rosado caliente, notaba como crecía en mi boca.
El compañero se termino de quitar los pantalones y slip para dejar toda su polla a mi disposición, joder estaba muy equivocado el cabrón tenía un pollon enorme. Mi vecino me dijo: chupale las pelotas que también están en la fiesta, el dueño del pollon le dijo a su amigo; pues si ,tenias razón la chupa de vicio. Yo seguía a lo mio, con la polla entre mis labios, jugando con sus pelotas ,mi lengua paseándose por su capullo. El compi me dijo; sigue así vas de puta madre, pero despacito que aún te queda un rato de polla. Mientras yo chupaba ellos hablaban de sus cosas como si nada, solo se interrumpía con algún gemido de placer o con alguna indicación, tras un buen rato ( ya me dolía la boca ) mi militar me dijo : venga maricón para un poco que le vas a gastar el rabo y lo va a necesitar ( ambos soltaron una carcajada). Me puse en pie y mi vecino se comenzó a desnudar al tiempo que su compañero se quitaba lo único que llevaba puesto, una camisa.
Los militares desnudos, dos adonis de gym, armados con unas pollas de locura y yo acojonado por la situación esperando ordenes, cuando me dijo: venga ahora ve al dormitorio tenemos una sorpresa para ti. Me fui hacia su dormitorio ellos iban detrás, al abrir la puerta vi mi regalo.
Llegó las 10 de la noche, yo llevaba listo como 1 hora, ansioso por ir, pero me quería hacer el duro para que no notase mis ganas de verle. A las 10 y 10 cerré mi puerta y llamé a su timbre, tardó en abrir.
Llegas tarde, esa fue su bienvenida, tímidamente dije " lo siento". Entramos en su casa iba hacia su salón, al llegar vi la mesa preparada para una cena de dos, me hizo tanta ilusión, otra cenita romántica y polvazo de postre. El militar no hablaba y yo a mil quise romper el hielo y le dije; que tal te ha ido? respondió secamente muy bien mucho curro, muy cansado.
Mi vecino se sentó a la mesa y yo seguí sus pasos y fui a ocupar la otra silla pero antes de que me sentara dijo; que coño haces? eso no es para ti. Mi cara tuvo que ser un poema porque se empezó a reír añadiendo ; hoy te toca servir la cena y las copas, espero que te comportes mamón. Yo no entendía nada, le pregunté que ha qué se refería y antes de que pudiera contestar.... salió del baño un tio. Adiós a la cena romántica, el militar dijo: te presento este es mi compañero de curro, se quedará unos días. El tipo ( alto, musculoso, rubio de piel blanca, todo lo contrario a mi vecino) se acercó y me dio la mano, mi militar le dijo; es mi vecino y hoy nuestro camarero. En ese momento quise morir, no sabía como reaccionar, estaba flipando.
Así fue durante una hora y media fui el camarero de los dos militares, solo me hablaban para pedir mas vino o pan, para servir otro plato o poner un hielo más, entre ellos se contaban sus historias tales como;"puf ayer me folle a una zorrita, la muy puta tragaba de vicio" o " menudo culo tenía para follarlo a saco, pero no se dejó para la siguiente jajajaja" y yo allí plantado sin moverme y sin hablar.
Tras un buen rato de cena y copas me dijo; retira la mesa que ya molesta, obediente lo hice, estaba loco por irme. Cuando terminé de recoger fui al salón y les dije a los militares; bueno me voy espero que disfrutasen de la cena ( con un tono irónico) el compañero me miró con cara rara y mi vecino dijo; aún no has terminado por hoy.
Mi militar y su compañero estaban sentados en el sofá y yo frente a ellos, cuando me dijo; ahora de postre ( con cara de picaron) vas a chuparle la polla a mi compi. El compañero se bajo la cremallera y sin pensarlo saco su polla, era rosada no muy larga pero gruesa y dijo; venga marica cumple ordenes de tu dueño. Yo no podía creerlo me estaba haciendo su zorra particular, antes de que pudiera reaccionar mi vecino me soltó ; venga joder comele la puta polla hasta que te diga que pares. Así fue me arrodille y comencé a chuparle el capullo, mi vecino miraba atento, era un capullo enorme rosado caliente, notaba como crecía en mi boca.
El compañero se termino de quitar los pantalones y slip para dejar toda su polla a mi disposición, joder estaba muy equivocado el cabrón tenía un pollon enorme. Mi vecino me dijo: chupale las pelotas que también están en la fiesta, el dueño del pollon le dijo a su amigo; pues si ,tenias razón la chupa de vicio. Yo seguía a lo mio, con la polla entre mis labios, jugando con sus pelotas ,mi lengua paseándose por su capullo. El compi me dijo; sigue así vas de puta madre, pero despacito que aún te queda un rato de polla. Mientras yo chupaba ellos hablaban de sus cosas como si nada, solo se interrumpía con algún gemido de placer o con alguna indicación, tras un buen rato ( ya me dolía la boca ) mi militar me dijo : venga maricón para un poco que le vas a gastar el rabo y lo va a necesitar ( ambos soltaron una carcajada). Me puse en pie y mi vecino se comenzó a desnudar al tiempo que su compañero se quitaba lo único que llevaba puesto, una camisa.
Los militares desnudos, dos adonis de gym, armados con unas pollas de locura y yo acojonado por la situación esperando ordenes, cuando me dijo: venga ahora ve al dormitorio tenemos una sorpresa para ti. Me fui hacia su dormitorio ellos iban detrás, al abrir la puerta vi mi regalo.