Tenía ganas de orinar, subí por la calle y en el primer bar que encontré entre, eran las diez y media de la mañana. Pedí un café con leche y me senté en una mesa, por la hora que era el bar estaba vacío.
El camarero un chico de unos treinta años, me servio el café con leche, pero antes me fui al lavabo, el baño, era muy grande, más que la sala del bar, me extraño. Las puertas de los WC, estaban abiertas, menos una. Las puertas eran completas, no se veía si había alguien. No había nadie.
El camarero, entró en el baño, vio que estaba con la polla fuera y meando en el urinario, se acercó. Se arrodilló, me empezó a chupar la polla, la puso dura. Al poco rato me corrí en su boca. Trago todo mi semen y me dijo:
- has entrado en un bar gay. asi damos la bienvenida s nuestros clientes, por cierto, invita la casa. Por la tarde hay más movimiento en el baño. Recomiendo que vengas.
Le baje el pantalon y le chupe también la polla, no llevaba slips. Iba preparado, le di la vuelta y llevaba un plug pequeño en el culo. Se lo quité, le metí la polla y me volví a correr.
Me limpié, me subí los pantalones y me marché.
A los pocos días volví...